Nuestro querido Párroco de la Iglesia de San José, que siempre está dispuesto para todo acto religioso, fue el encargado de bendecir las instalaciones.
La Presidenta de la Delegación, a toda la concurrencia le explicó la falta que se tenía de un local así para todo tipo de reuniones.
Comida fraternal de carácter religioso, como entre los primeros cristianos, destinada a estrechar los lazos que los unían.